Infodemia: exceso de noticias en época de pandemia
Según la OMS una infodemia masiva, es una cantidad excesiva de información – en algunos casos correcta, en otros no – que dificulta que las personas encuentren fuentes confiables y orientación fidedigna cuando las necesitan.
La Licenciada en Comunicación, Graciela Marcet, explica qué está sucediendo en esta época y cuáles son las principales recomendaciones. “Estamos viviendo uno de los momentos de mayor explosión de las Fake News. Si bien ahora las conocemos con ese nombre, sabemos que es un fenómeno que existe desde hace mucho tiempo, pero tal vez ahora somos conscientes del impacto o de las consecuencias sociales que puede generar la producción de noticias engañosas a nivel masivo”.
Hoy sabemos que es grandísima la cantidad de noticias o de datos que nos llegan a través de plataformas como WhatsApp, como los audios de “alguna eminencia médica” que nos recomienda algún dato o tip para combatir el Coronavirus. Y en este contexto de pandemia donde tenemos tanta cantidad de información, muchas veces se nos pasa creer que eso realmente es así y después nos damos cuenta que no, y que pueden ser perjudiciales para otros si las reproducimos sin ponerlas bajo la lupa o tratar de verifícalas, afirmó la Licenciada.
¿Qué hacer ante la invasión de noticias?
La premisa básica debería ser dudar o desconfiar de las distintas informaciones que nos llegan desde distintas plataformas o también desde los medios masivos de comunicación. Muchas veces, a través de esta avidez de proveer a los públicos cierto ritmo de consumo de información que ha generado esta situación de angustia y de incertidumbre, los medios de comunicación tradicionales también caen en la falta de tiempo para verificar la fuente o si es verídico o no.
Hay que dudar un poco, chequear distintas fuentes, buscar la misma información a través de fuentes y de medios de diversos orígenes, que tengan distintos intereses para ver qué tan confiable es. Ahora el Gobierno Nacional lanzó la plataforma CONFIAR (https://confiar.telam.com.ar/) que tiene distintas opciones para ir chequeando qué es verdadero y qué es falso.
Son varios los grupos de profesionales de la comunicación que se han ofrecido a hacer este trabajo. Ahora la sociedad está descubriendo que la comunicación es un servicio esencial y no solamente los periodistas o los comunicadores profesionales son los que tienen que hacer el trabajo de chequear esta premisa básica del periodismo de consultar al menos tres fuentes, sino también los públicos y los usuarios comunes. Hay que acostumbrarse a que no todo lo que llega es verídico o por más que salga en un medio de comunicación también se puede desconfiar de eso y tratar de buscar esta misma información en distintas fuentes.
Esta es la dicotomía que se nos presenta hoy, entre dudar primero y después confiar en algo para poder sobrevivir a este contexto de crisis mundial que ha puesto en jaque también a la comunicación y a la información.